Beato Jacobo Bianconi da Bevagna

Beato Jacobo Bianconi da Bevagna, sacerdote

(1220-1301)

Jacobo (Santiago) Bianconi (Giacomo Bianconi da Bevagna) nació el 7 de marzo de 1220 en Bevagna (latín: Mevania) en Umbría. Según las leyendas, los signos milagrosos acompañarían su nacimiento. Lo más asombroso fue la aparición de tres estrellas resplandecientes en el cielo, de las cuales surgieron tres figuras dominicas. Resultó que al mismo tiempo nacieron Tomás de Aquino y Ambrosio Sansedoni de Siena. Cuando era niño, logró la paz entre dos familias en disputa. En 1236, a la edad de 16 años, ingresó en el convento dominico de Spoleto y luego estudió teología en Perugia. Como resultado de los sermones que escuchó como monje durante la Cuaresma, decidió vivir en una pobreza extrema, que excedía los estándares dominicos. El arrepentimiento y la adoración fueron las verdaderas fuentes de las que extrajo el fuego de caridad que hizo de él uno de los más grandes apóstoles y predicadores de su tiempo. En su ciudad natal fundó un convento dominico, del que se convirtió en el primer prior. Después de que la ciudad fuera saqueada por Federico II en 1248, brindó una gran ayuda a los sobrevivientes y refugiados. También ayudó a reprimir el movimiento herético de los nicolaítas. En 1281, el capítulo general de la Orden le concedió el título de predicador general. En 1291, se convirtió en superior del convento de Spoleto, y ocho años después, asumió el cargo de prior del monasterio de Foligno.

Hay una leyenda según la cual Jacobo Bianconi una vez se arrodilló ante un crucifijo y expresó dudas sobre su salvación personal. En ese momento, la sangre iba a brotar de la cruz, y Cristo, hablando desde la cruz, le aseguró que esa sangre era una señal de que se salvaría. Murió en Bevagna el 22 de agosto de 1301. Según las leyendas, cuando agonizaba, se le aparecieron los santos Jorge y Domingo, así como la Santísima Virgen, que creía que lo llevaría al cielo.

Jacobo Bianconi escribió dos tratados: Speculum humanitatis Salvatoris Iesu Christi [esp.  Espejo de la Humanidad de Jesús] y De Ultimo iudicio universali sive speculum peccatorum [esp. Espejo de los pecadores o último juicio universal]. Desafortunadamente, no se han conservado hasta nuestros días.

Ya en el siglo XIV se hicieron esfuerzos para obtener su canonización. Para ello, se recogieron pruebas y materiales para escribir una biografía. Desafortunadamente, alrededor de 1375 todos estos documentos se quemaron en un incendio en el monasterio de Bevagna. En 1377, Buenaventura Camasseo, que conocía estos archivos, hizo una biografía de Jacobo Bianconi, que había muerto en la opinión de santidad y adorado. Esta es evidencia de un culto temprano que continuó. Las biografías posteriores fueron escritas en el siglo XVII. Finalmente, fue aprobado por el Papa Clemente X el 18 de mayo de 1672. Su memoria se celebra el 23 de agosto.

Bibliografia:

 

  • Iacobilli L., Vita del B. Giacomo da Bevagna dell’Ordine de’Predicatori, Foligno 1644.
  • Tinassi N.A., Ristretto della vita del beato Giacomo da Bevagna dell’Ordine de Predicatorii fatto da un religioso del medemo ordine, Roma 1674.
  • Becchetti F.A., Vita del beato Giacomo di Bevagna dell’Ordine de’Predicatori, Roma 1785.
  • Emore P., La „Vita” del beato Giacomo Bianconi scritta da Ventura da Bevagna: unm testo ritrovato?, „Hagiographica”, 4 (1997), p. 253–299.