Juan García de Loaysa

García de Loaysa y Mendoza, cardenal

(1478-1546)

García de Loaysa (Loaísa) y Mendoza nació en 1478 en Talavera de la Reina, España. Sus padres fueron Pedro de Loaysa y Catalina de Mendoza. El 25 de noviembre de 1496, a la edad de 18 años, ingresó en el convento dominico de San Esteban de Salamanca. Tanto los miembros de la familia del padre como de la madre habían estado en este orden antes. Jerónimo de Loaysa y Carvajal, el primer arzobispo de Lima y Primado del Perú, provenía de la familia de su padre. Sin embargo, parece que el provincial dominico español, Alfonso de Loaysa, no pertenecía a su familia. Su hermano Domingo de Mendoza, que se había incorporado cinco años antes, también estaba en la orden.

El monasterio de San Esteban de Salamanca era famoso por la dureza de la vida, que probablemente no favorecía al novicio y era causa de sus constantes enfermedades. Probablemente esto y la influencia de su hermano mayor facilitaron el traslado de García al convento de San Pablo en Peñafiel (Valladolid). Allí también, en 1495, hizo sus votos religiosos. Estudió en la Universidad de Alcalá y luego en Valladolid. Durante su vida monástica, fue prior del monasterio de Santo Tomás de Ávila, y luego de San Pablo en Valladolid. El 19 de abril de 1516, en el capítulo provincial de San Ildefonso de Toro, fue elegido provincial de la provincia dominicana de España, y dos años más tarde los hermanos reunidos en el capítulo general del convento de Santa María sopra Minerva lo eligieron Maestro General de la Orden. En la rebelión en España de 1520–1522 prohibió la participación en las disputas políticas y castigó a cuatro clérigos que acabaron en prisión. En los años siguientes visitó conventos monásticos para apaciguar el ánimo insurgente.

García fue también inquisidor de Castilla y Aragón y presidente del Consejo de la Inquisición. Debido a las actividades relacionadas con el apoyo al rey de España y al emperador romano Carlos V, descuidó sus deberes monásticos, por lo que renunció como General. El 8 de junio de 1524 fue elegido obispo de Osma, siendo ordenado obispo el 29 de septiembre del mismo año. El emperador Carlos emitió en 1524 una orden para que los obispos residieran en sus diócesis, pero Loaysa no estaba incluido en ella porque era el confesor y limosnero imperial. Desde 1529 fue también embajador de España ante la Santa Sede.

El 9 de marzo de 1530, el Papa Clemente VII lo nombró cardenal presbítero con la iglesia titular de Santa Susana. Tras ser trasladado a la diócesis de Sigüenza, regresó a España. No participó en el cónclave de 1534. En 1539 se convirtió en arzobispo de Sevilla. Y al cabo de unos años se convirtió en el gran inquisidor de España. Murió el Jueves Santo de 1546 en Madrid.

Bibliografia:

  • Olmedo Jiménez M., Jerónimo de Loaysa, O.P. Pacificador de españoles y protector de indios, Salamanca 1992.
  • Castro J. N., Los sepulcros del Cardenal Fray García de Loaysa y sus padres en el Monasterio dominico de Talayera de la Reina, „Archivo Español de Arte” 76 (2003), no. 303, p. 267–276.
  • Nieva Ocampo Guillermo, El confesor del Emperador: la actividad política de fray García de Loaysa y Mendoza al servicio de Carlos V (1522–1530), „Hispania”, 75 (2015), no. 251,
    p. 64–668.