Sibilliana Biscossi

Sibilliana Biscossi, virgen dominica y terciaria

(1287-1367)

Nació en Pavía en 1287 en el seno de una familia noble. Se quedó huérfana a una edad temprana. Además, a la edad de 12 años, perdió la vista. La leyenda cuenta que se le apareció Santo Domingo. A la edad de 15 años, ingresó a la Terciaria orden dominica en la Iglesia de San Tommaso en Pavía, donde vivió enclaustrada hasta su muerte en 1367. Vivía según un estricto ascetismo, dedicándose a la contemplación y a la oración. Se le atribuyeron visiones proféticas, algunas de las cuales se hicieron realidad. Dirigió consejos e invitaciones al arrepentimiento a numerosos fieles que acudían a ella. Ella deseaba ser emparedada en una celda del convento. Fue descrita como “la virgen purísima, iluminada por la luz del Espíritu Santo, ciega de cuerpo, pero en el espíritu distinguida por signos y virtudes” (virgo purissima, quae corpore caeca sed mente lumine Spiritus Sancti illustrata, signis et virtutibus eminenter claruit). Murió el 19 de marzo de 1367. Desde 1799 su cuerpo se encuentra en la iglesia catedral de Pavía. El Papa Pío IX aprobó su culto por decreto del 17 de agosto de 1854, reconociéndola beata por la Iglesia Católica. El memorial litúrgico se celebra el 19 de abril. En Italia, es venerada como patrona de los sirvientes.

Bibliografia:

  • Terenzio P., Vita della beata Sibillina de Biscossi pavese, Pavia 1857.

  • Albanini M., Biscossa S., Biscossa R., Gli occhi dell'anima. La Beata Sibillina Biscossi (1287–1367), Pavia 2010.